Suspendida por lluvia
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La corrida con motivo del aniversario 214 de la independencia de México, término con el festejo suspendido después de haberse lidiado, el cuarto ejemplar de la tarde, debido a una gran tromba que azotó los alrededores de la Monumental plaza de Toros México.De esta manera inició el serial de corridas en La México, en donde Pepe Murillo, terminó con una herida en la pierna derecha; además de la confirmación de alternativa de Luis Ignacio Escobedo, y las actuaciones de Juan Luis Silis, que bajo la lluvia, toreó a un ejemplar con el cual tuvo momentos el Rejoneador yucateco, Cuauhtemoc Ayala, quién llegó a la Monumental a mostrar un toreo muy básico en el arte de Maria Alba, y terminó robándose una salida al tercio la cual le fue protestada por el público capitalino.
El encierro de la ganadería de San Marcos, salió bien presentado y exigiendo el carnet a los toreros. “Mirlo” recibió el arrastre lento por su calidad y bravura, la cual no supo entender el caballero del sureste, quien de lo más destacado que realizó, fueron algunos recortes, y deficiente en la manera de poner banderillas, al lanzar a toro pasado y saliendo de la suerte.
Falló con la hoja de peral y escuchó dos avisos, por lo cual el público se metió con él. Cínicamente se robó una salida al tercio.
“ Petirrojo “ No 156 y 478 kg, el toro de la confirmación de alternativa de Luis Ignacio Escobedo, quien venía lleno de ilusiones, pero sobre todo ambicionando un triunfo que lo ayudará a proyectar su carrera.
Desafortunadamente peleando en la cabalgadura del picador Alfredo ha Ruíz, en fuerte vestida, se le aflojó el pitón izquierdo, por lo cual el público solicitaba el cambio, situación que nunca se dio, tal vez porque no lo vio el juez de Plaza. Así que en medio de la protesta del público, Escobedo comenzó a lidiar a su ejemplar el cual no fue sencillo y le presentó algún problema, y entre la molestia del público, no lo dejaron estar. Así que terminó rápido y se retiró en silencio, a pesar de una buena estocada.
Pepe Murillo del Estado de Jalisco, fue el encargado de confirmar el doctorado en la Plaza México, siendo el testigo, Juan Luis Silis.
Pepe Murillo, volvió muchos años después, nuevamente a la capital del país, lanceó, acompasadas, verónicas a “Gorrión” y anduvo muy dispuesto ante un buen ejemplar, al cual pudo aprovechar hasta antes de qué comenzaran a caer las primeras gotas de lluvia.
El Toro de San Marcos, pedían la distancia, y el Torero se fue ajustando, mostrando pasajes interesantes. Sin embargo, el viento le fue descomponiendo las embestidas al burel fina, catadura, el cual comenzó a ceñirse y provocar la desconfianza en Murillo.
En el final de faena, el ejemplar le echó mano al hacer un quite por bernardinas, el cual fue aparatoso y recibió la asistencia de las cuadrillas, quienes lo llevaron rumbo a la enfermería, para segundos después salir por su propio pie y tomar la espada.
El torero fue ingresado a la enfermería de la Plaza para después ser trasladado al nosocomio donde fue atendido.
Luego apareció Juan Luis Silis quién topó con “Gorrión” un toro con cara que puso a prueba su capacidad lidiadora. Apenas pudo mostrar algún detalle importante con la capa, por lo húmedo y encharcado del ruedo tras recibir un puyazo, ya no se le colocaron banderillas.
De esta forma, Silis echó mano a sus recursos y comenzó a torear al astado quien tuvo un gran inicio, Juan Luis al menos tres series de valía.
Lamentablemente la lluvia ya no le permitió tener continuidad y luego el toro fue cambiando de lidia. Desafortunadamente pinchó con lo que desdibujó su labor y le sonaron un aviso.
Al caer este ejemplar oficialmente terminó el festejo, quedándo con las ganas de actuar Angelino de Arriaga, -quien siempre que ha venido a México, le ha tocado padecer de la lluvia, además de Juan Pedro Llaguno, quienes tendrán seguramente una nueva oportunidad más adelante
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